São Paulo, 9 may (.).- La compañía brasileña Braskem, la mayor petroquímica de América Latina y una de las más grandes del mundo, registró en el primer trimestre de este año pérdidas por valor de 273 millones de dólares (unos 255 millones de euros).
El resultado contrasta con el beneficio neto de 35 millones de dólares que registró en el primer trimestre del año pasado, según el informe de resultados de la empresa divulgado cerca de la pasada madrugada.
No obstante, consiguió reducir un 14 % sus pérdidas en comparación con los últimos tres meses de 2023.
Los ingresos por ventas sumaron 3.618 millones de dólares entre enero y marzo, un 3 % menos interanual, aunque crecieron un 7 % en comparación con el periodo octubre-diciembre del año pasado.
Braskem explicó en su informe que el volumen de ventas fue superior en Brasil y México debido principalmente a "la mayor disponibilidad de producto" y a "la adecuación de la demanda tras la estacionalidad observada en el último trimestre de 2023".
Mientras, en Estados Unidos y Europa, el volumen de ventas "se mantuvo en línea con el trimestre anterior y fue inferior al del primer trimestre de 2023" en un 2 %.
En el primer trimestre del año, el ebitda recurrente (resultado bruto de explotación) aumentó un 12 % frente al igual periodo de 2023, hasta los 230 millones de dólares.
Braskem indicó que prevé ejecutar 440 millones de dólares en inversiones para este año y que al final del primer trimestre ya había aplicado 118 millones.
La deuda bruta consolidada cerró marzo pasado en los 10.947 millones de dólares, un 12 % más con respecto al mismo mes de 2023.
Con plantas en Brasil, Estados Unidos, Alemania y México, Braskem es la sexta mayor petroquímica del mundo y lidera la producción de resinas termoplásticas en América.
Su producción se centra en las resinas de polietileno, polipropileno y cloruro de polivinilo, así como en diversos compuestos químicos, como etileno, propileno, butadieno, entre otros.