Por Michael S. Derby
NUEVA YORK (Reuters) - La presidenta del Banco de la Reserva Federal de Boston, Susan Collins, afirmó el miércoles que la economía estadounidense necesita enfriarse para que la inflación vuelva al objetivo del 2% fijado por el banco central.
"Será necesaria una desaceleración de la actividad para garantizar que la demanda se alinea mejor con la oferta para que la inflación vuelva de forma duradera" al objetivo oficial, dijo Collins en unas declaraciones que pronunciará en un acto del Instituto Tecnológico de Massachusetts.
Por ahora, en lo que se refiere a la política monetaria, "las recientes sorpresas al alza de la actividad y la inflación sugieren la probable necesidad de mantener la política monetaria en su nivel actual hasta que tengamos una mayor confianza en que la inflación se mueve de forma sostenible hacia el 2%", señaló.
Las declaraciones de Collins fueron las primeras desde la reunión del Comité Federal de Mercado Abierto de la semana pasada. Entonces, las autoridades mantuvieron su rango de tasas de interés a un día entre el 5,25% y el 5,5%, mientras siguen lidiando con unas presiones inflacionarias que se han mostrado este año más resistentes de lo que esperaban.
Esta persistencia ha generado una considerable incertidumbre sobre el momento en que la Fed podría recortar las tasas. En sus últimas comparecencias, muchas autoridades monetarias han mantenido viva la perspectiva de un alivio, pero se han echado atrás a la hora de proporcionar cualquier tipo de marco temporal para la bajada del costo del crédito, mientras observan los datos en busca de progresos en la reducción de la inflación.
Collins dijo que, "en general, la política monetaria sigue bien posicionada para responder a la información entrante, a medida que evaluamos la evolución de las perspectivas y los riesgos". Asimismo, indicó que es "optimista" ante la perspectiva de que la Fed pueda lograr la inflación al 2% "en un tiempo razonable, con un mercado laboral que sigue siendo saludable".
Dicho esto, reconoció que conseguir que la inflación alcance el 2% "llevará más tiempo de lo que se pensaba", además de señalar que "no hay una senda preestablecida para la política monetaria: requiere decisiones basadas en una evaluación metódica y holística de una amplia información".
Collins también afirmó que las expectativas de inflación a largo plazo han sido coherentes con el objetivo del 2% de la Fed, añadiendo que el reciente aumento de la productividad probablemente no es la creación de una tendencia duradera. Collins además dijo que es probable que los empresarios puedan absorber mayores demandas salariales.
(Editado en español por Carlos Serrano)